Como la demencia lleva a la pérdida del autocontrol, puede ocurrir y de hecho ocurre que la inhibición ante comportamientos no aceptables se pierdan. Como cuidador debemos tener claro que en la mayoria de las ocasiones son consecuencia de la propia enfermedad, eso nos hace no implicarnos personalmente y alejar esos sentimientos de verguenza que podamos tener.
El éxito en estas situaciones del cuidador es poder llegar a tener una actitud conciliadora y reafirmante. Nuestro familiar Alzheimer lo esta pasando igualmente muy mal por lo que esta sucediendo, por el ambiente o por la misma pérdida de control.
Como cuidador tenemos que empatizar siempre con nuestro familiar Alzheimer, ponernos en su situación y no pensar nunca que es un ataque directo hacía nosotros o hacia otras personas que en ese momento esten con nosotros.
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